Por Jesús Vélez Banegas

El fútbol profesional de primera división de la Liga Salva Vida, ya entró en un ordenamiento que le ha impuesto el Comité Ejecutivo de FENAFUTH, quien haciendo uso del poder que le otorga la norma puso los términos y condiciones para arrancar el torneo de Apertura.

Creo los dirigentes de los equipos llamados rebeldes distrajeron su tiempo, en vano, gastaron pólvora en zopilotes. Eso terminó alargando la posibilidad de organizar, como en otros países vecinos, un buen plan de bio seguridad, para activar el fútbol, que es la base de todos los procesos de selecciones, en las que internacionalmente nos toca participar.

El tema principal, de selecciones nacionales es la mayor que deberá buscar un puesto en la octagonal que se inicia en junio, y que nos podría abrir camino para Qatar 2022.

El asunto es que acá el seleccionador se fue para Uruguay, hasta donde le han estado depositando lo que gana, por hacer nada. Se pudo hacer un trabajo en circuito cerrado en Siguatepeque en donde FENAFUTH tiene un proyecto desarrollado, que consta de hotel y canchas de entrenamientos.

De nada sirve activar el fútbol profesional si los procesos de selecciones, Sub 20-23 y obsoluta duermen el sueño de los justos.

Los aficionados se preguntan: donde esta Coito, eso si se sabe, en Montevideo Uruguay de donde se especula podría regresar en los primeros días de septiembre.

Se habla mucho de cambios y que eso los producirá el sistema que está exigiendo FIFA Y CONCACAF a través del licenciamiento. Esos organismos creen firmemente que si los equipos se ordenan técnica y administrativamente pueden tener un despegue para que los dirigentes pongan menos recursos económicos.

Dirigentes aportadores ya están quedando pocos y hasta se asegura son especies en peligro de extinción, por eso el balompié tiene que desarrollar el trinomio de : espectáculo, comodidad y seguridad.

Lo bueno en este momento con el futbol, es que HOY SI vamos a comenzar el próximo 26 de septiembre.