Redacción | Inter FM | viernes 21/06/19

La Sagradas Escrituras nos dejan muchas parábolas del hijo del Padre que vino a pagar con su vida los pechados del mundo.

Pedro que fue el apóstol preferido de Jesús siempre recibía del enviado del altísimo el conocimiento y en cierta oportunidad lo sorprendió con una expresión. “Pedro cuidado con la red”. La interpretación es que en la red caen peces buenos y malos.

La idea de quienes estudian teología es que el hijo de Dios se refería a la “red” por donde actualmente pasan las noticias del mundo entero, que lo hace posible un teléfono, de los que hoy abundan y les llaman “inteligentes”.

La expresión del “Hijo de Dios”, hoy tiene carta de ciudadanía y lo estaría repitiendo para los miles de millones de habitantes que tiene el mundo. Nadie desde el más encumbrado hasta el más humilde deja de tener como herramienta, de trabajo, un teléfono con red.

No es extraño, entonces, que los jugadores de fútbol tengan a mano, siempre, un teléfono con el que se mantienen conectados a través de sus whatsapp, facebook, twitter, messenger, instagram, con familiares, amigos, esposas o novias.

Le tocó a Quioto, pero no tenía a su lado a Jesús, para que le dijera “cuidado con la red”. Alguien usando el mismo sistema de comunicación mando a la “red” la foto en donde el seleccionado esta distraído con su teléfono conectado con alguien, que no ha sido identificado.

La reacción fue fulminante y le cayeron al jugador bombazos de todos los tamaños, más aún cuando en el partido falló un gol, muchos en son de broma aseguraron que deseaba sacarse una fotografía para subirla a la red, como hizo un jugador de Motagua después de anotar un gol.

Alguien del cuerpo técnico, si Fabián Coito no tiene tiempo de vigilar a sus jugadores para que no se distraigan en el camerino cuando están a punto de iniciar un juego, con el uso de los teléfonos ya que se debe tener cuidado con la red.

Nuestra representación nacional, una vez más no tiene identidad y el seleccionador antes de irse a los Estados Unidos abrió el paraguas de 24 varillas, enorme, para decir que Copa Oro no es lo trascendente en su proceso de preparación.

Después de perder ante Jamaica, las declaraciones de Coito fueron tirar bombas de humo, de las que usa la policía, para distraer la atención. Le tiro toda la responsabilidad a CONCACAF, asi como a los árbitros por no haber marcado lo que a su criterio fueron faltas en el área de los “yumecas”.

Creo que el seleccionador hondureño, Fabián Coito, debe comenzar a llamar la atención de sus dirigidos para que tengan “cuidado con la red”.