El equipo catalán recibe al Sevilla en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey con el marcador adverso de 0-2 en la ida de esta eliminatoria.

Con la misión de otra épica remontada, el Barcelona enfrenta a un rival muy complicado pero al que ha derrotado hace unos días a domicilio y justamente por el resultado que necesita este día para empatar la serie (0-2).

En la primera mitad, apenas al minuto 12 el francés Ousmane Dembélé anotaba un golazo para los culés y ponía a soñar con la remontada que le daría la oportunidad al equipo de clasificar a la final de esta edición de Copa del Rey.

El equipo sevillista tuvo la oportunidad de pegar y sentenciar la eliminatoria al 72, cuando Lucas Ocampos lanzó un penalti pero Ter Stegen lo salvó y le dió una oportunidad más a su equipo de empatar la serie.

De tanto apretar, el equipo culé logró aprovechar un error defensivo del Sevilla en el último minuto de juego y Piqué, con un mortal cabezazo, mandó la eliminatoria a la prórroga. Al Sevilla le expulsaron a Fernando por doble amonestación y tuvo que jugar los 30 minutos de prórroga con uno menos.

En la prórroga fue el equipo culé que aprovechó sus armas y el jugador de más que le dió la clasificación a una nueva final de Copa del Rey. El gol de la diferencia marcado por Martin Braithwaithe le daba la clasificación y hacía de la operación remontada un rotundo éxito.