El FC Barcelona finalmente pudo concretar el fichaje más deseado tanto por la institución como por los fanáticos culés en éste mercado de transferencias al hacerse oficial la llegada de Robert Lewandowski, procedente del Bayern Múnich a cambio de 45 millones de euros más otros cinco en variables.

Unas negociaciones que se volvieron muy ásperas, sobre todo en Alemania, después de que el manager del conjunto bávaro, Oliver Kahn, manifestara en reiteradas oportunidades que su delantero estrella no estaba a la venta mientras que el futbolista mostrara públicamente su clara intención de dejar el club.

Ahora, con la operación ya finiquitada, fue el entrenador de Los Rojos, Julian Nagelsmann, el que cuestionó el accionar del equipo azulgrana durante éste mercado de transferencias, entendiendo que está atravesando una grave crisis financiera.

“Tienen un montón de nuevos jugadores, no solo Robert. Para ser honesto, es el único club que no tiene dinero, pero compra a cualquier jugador que quiere”, disparó el alemán en diálogo con el periódico Bild y añadió: “No sé cómo hacen eso. Es un poco raro, un poco loco... Tienen mejor equipo que el año pasado”.

Cabe mencionar que la entidad, presidida por Joan Laporta, cedió el 10% de los derechos que le corresponden de televisación por 25 años al fondo estadounidense Sixth Street a cambio de 207,5 millones de euros (215,5 millones de dólares).

En esa línea, Nagelsmann lamentó la partida de su máximo artillero: “Era una cuestión de dinero. Él quería el reto y quedaba libre en un año. Claro que es complicado y lo extrañaremos. (En cuestión de números) Al final, no es tan mala operación por el Bayern”.

Todavía inmerso en una crisis económica, y con el ojo de la FIFA puesto sobre ellos con el Fair Play financiero de por medio, el Barcelona intenta reconstruir un equipo para que esté al nivel de los mejores de Europa.

Además de la llegada del delantero polaco de 35 años, Xavi Hernández contará con el extremo brasileño Raphinha (48 millones de euros al Leeds) y los futbolistas Andreas Christensen y Franck Kessié (del Chelsea y Milan respectivamente) que llegaron como agentes libres.

Barcelona, sin embargo, está lejos de poner punto final a su participación en el mercado de transferencias. Con la vista puesta más en vender que en comprar, la directiva continúa trabajando en la zona defensiva en donde se espera al menos un refuerzo más.