Aquellos casi 9.000 espectadores que hubo el pasado 15 de agosto en el partido ante Montpellier, donde el público de Reims regresó a los estadios después de 302 días de ausencia por el COVID-19, no tendrán comparación con lo que se vivirá este fin de semana: el domingo este club recibirá al Paris Saint Germain por la Fecha 4 de la Ligue 1 y se espera más del doble de aforo para ver el debut de Lionel Messi.

El estadio Stade Auguste-Delaune II se prepara para recibir al astro argentino y este momento histórico empieza a manifestarse en la venta de entradas para el partido: ya se agotaron los 20.546 asientos que estaban disponibles y el recinto estará a tope para ver a Messi hacer su estreno en el PSG.

“El fin de semana anterior a la oficialización de Messi, vendimos tantas entradas (6.000) en cuatro días como en tres semanas”, explicó Alexandre Jeannin, gerente de venta de entradas del Reims, en diálogo con L’Equipe.

Según comentó Jeannin, recibieron solicitudes de tickets de todas partes del mundo: “El número de solicitudes es excepcional, es difícil de cuantificar. Y tuvimos algunas ventas bastante increíbles en la taquilla en línea, con compras provenientes de todo el mundo: desde Chile, Corea del Sur, Tailandia, Egipto o India, es una novedad”.

A esta altura, cuando quedan pocos días para el partido, los precios de las entradas en la reventa siguen subiendo. En principio los boletos oscilaban entre los 35 y los 100 euros (USD 40-120) pero ahora ya hay quienes pagan de 400 a 1.000 euros (USD 470-1.200) para encontrar un lugar la venta secundaria que ofrece el propio club en su sitio web.

Todo sea por ver al astro argentino en su primera experiencia en el fútbol francés, que probablemente sea este domingo. El Paris Saint Germain encadena tres victorias consecutivas y es el único líder de la liga francesa por delante del Angers, aunque todavía no han jugado Neymar, Sergio Ramos y el propio Messi. Según indicó Mauricio Pochettino en declaraciones a ESPN hace unos días, espera poder contar con el crack rosarino en el próximo cotejo.

“Fue una muy buena semana (última) para Leo en los entrenamientos. La semana que viene será larga, pero si todo va bien esperamos que ya pueda estar en la plantilla y empezar a formar parte de la plantilla a un nivel competitivo. Los nuevos se fueron acoplando al equipo y hay que manejar esos niveles. Más allá de eso estoy muy contento de haber ganado y tener nueve puntos en tres partidos”, destacó tras el último compromiso ante el Brest.