Hay muchas cosas que aún no se pueden determinar en el fútbol, como el hecho que han existido muchos deportistas que han pasado por el deporte, unos que han marcado una diferencia notable y otros que han logrado ganar mucho.

Pero dentro de este gigantesco grupo de futbolistas, hay una serie de futbolistas descomunales, propios, eternos y sobre todo, ganadores. Entre estos esta un argentino, no, dos argentinos, que a pesar de ser argentinos a mucho orgullo, tienen al mundo del fútbol separado entre quien es más grande que el otro. ¿Quien es el rey del fútbol?

Maradona y Messi hicieron lo que cualquier futbolista en el mundo quisiera lograr, el primero conquistó un Mundial en México 86 y llegó a la final del mismo torneo en el 90, lo que lo catapultó a ser uno de los más grandes sino es que el más grande de la historia.

Pero el segundo, Messi, ha hecho todo lo demás, ha conquistado Europa y ayer, ganó su ¡sexto balón de Oro!. Lionel logró lo que nadie ha hecho, y dejó atras a los que han podido molestar su record.

La pregunta es ¿porque Messi no es el más grande, si lo ha hecho todo en el fútbol?, la respuesta más sencilla es decir que no ha logrado nada con la selección, pero ¿será esto lo que separará a Messi de ser, por unanimidad, el más grande jugador de todos los tiempos?

Seis Balónes de Oro deberían ser suficiente para asegurar que Messi es lo mejor que el planeta fútbol nos ha dejado, siempre existirá un sesgo para aquellos que determinan otras cosas como importantes. Incluso han hecho que Messi no le encuentre el valor real a los premios individuales, como lo hizo saber en una entrevista en la que dijo "cambiaría todos mis premios individuales por un Mundial".

Esta mentalidad es simplemente por lo que el mundo del fútbol, y sus aficionados argentinos, le exigen, ya que sin el, la situación no tendría ni color para ganar un Mundial, que no lo ven en sus vitrinas desde 1986.

La decisión no es definitiva, la verdad no será absoluta hasta que Messi logre ganar un Mundial o algo con su selección. Debería no ser así, pero el fútbol es así, unos lo juegan y tienen la suerte de su lado, y otros lo hacen suyo pero no viven de la suerte.