El equipo blanco se enfrentó este miércoles al Atalanta de Italia por la Supercopa de Europa y todo comenzó con paso firme pese a un inicio un poco abrumante para los blancos.

Los italianos tuvieron que aguantar los primeros 20 minutos muy buenos del Madrid, que tocó el balón mucho entre sus mediocampistas y con mucha participación de Vinicius y Rodrygo.

Mediante pasaban los minutos pudo ordenarse y controlar las salidas blancas, que se quedaban sin posesión de balón rápido obligando al pase largo que no fue un arma de ataque clara.

Pese a eso, Real Madrid tuvo la oportunidad más clara con un disparo de Rodrygo al palo tras una asistencia de lujo de Vini.

En la segunda mitad, con los cambios tácticos de Ancelotti, Real Madrid contó con más oportunidades de hacer daño y el resultado se rompió a raíz del movimiento de Bellingham, que habilitó muy bien a Vini y este dejó solo a Valverde que definió el primer gol.

El segundo gol llegó rápidamente en los pies de Mbappé. Esta vez fue Rodrygo el que robó el balón en tres cuartos de cancha y salió como una bala para habilitar a Vini. Pese al mal pase del brasileño, Bellingham recuperó y dio un excelente pase a Mbappé que mandó a guardar la pelota para el 2-0.

El resultado fue más que suficiente para cerrar el partido y darle la sexta supercopa al conjunto blanco, además de comenzar la temporada a paso firme.