COVID-19: tercera dosis de la vacuna Pfizer eleva protección al 95%
Una investigación de universidades y hospitales analizó los datos de más de 1 millón de personas y detectó que los refuerzos multiplican la inmunidad.
16 Sep 2021. 09:53 AM
Un estudio realizado por científicos israelíes determinó que una tercera dosis de la vacuna de Pfizer contra el COVID-19 reduce 10 veces la posibilidad de infección, comparándolo con quienes recibieron dos dosis más de 5 meses antes. En otras palabras, el refuerzo eleva la protección frente al SARS-CoV-2 a un 95%. La investigación fue publicada este miércoles por sus autores en el New England Journal of Medicine.
Los expertos de Israel publicaron su trabajo a favor de aplicar terceras dosis dos días después de que un grupo científico de la agencia de control de medicamentos de EEUU (FDA, por sus siglas en inglés) y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunciara que no había hallado ninguna prueba sólida de que sea necesario un refuerzo de la vacuna para la población general.
Según dijeron, dos dosis continúan siendo muy eficaces incluso contra la variante Delta, de mayor contagiosidad por lo que concluyeron que no había pruebas todavía de la necesidad de aplicar booster a la población en general. El grupo publicó su trabajo en The Lancet este 13 de septiembre.
Pero dos días más tarde, el Ministerio de Sanidad de Israel difundió los resultados del primer estudio que se llevó a cabo en ese país sobre personas inoculadas con dosis de refuerzo de Pfizer-BioNTech, que es la formulación usada allí. El análisis de llevó a cabo desde el 1 de julio, cuando Israel empezó a aplicar las terceras dosis. Los estudios fueron realizados por expertos de universidades y hospitales entre 1 millón de pacientes y llegó a la conclusión que los refuerzos son altamente efectivos contra las infecciones.
El estudio ya había sido publicado e informado previamente, aunque no se había revisado por pares, a principios de mes en el centro de investigación en línea MedRxiv .
La tasa de infecciones confirmadas fue más de 10 veces menor entre las personas que recibieron el refuerzo en comparación con las personas que no lo recibieron. La tasa de infección grave es 19 veces menor.
Israel habilitó los refuerzos para todos los mayores de 12 años a fines de agosto. Hasta la primera mitad de setiembre, casi 3 millones de israelíes recibieron una tercera vacuna. El país continúa teniendo un promedio de 10.000 casos nuevos por día. Sin embargo, las personas no vacunadas componen el 65% de todas las infecciones graves en el país y alrededor del 90% de todas las personas que están conectadas a un respirador mecánico.
Pero el ensayo publicado publicado este lunes en The Lancet, revisado por pares, por un grupo internacional de expertos en vacunas se opuso a proporcionar terceras dosis a la población en general, ya que las dos dosis de vacunas continúan ofreciendo una fuerte protección contra el virus y recomendaron esperar a que los laboratorio avancen en la elaboración de componentes adaptados a las nuevas variantes del SARS-CoV-2.
Un comité asesor de la FDA se reunirá este viernes para debatir la administración de una tercera dosis de la vacuna de Pfizer. Se trata del mismo grupo que recomendó en diciembre la autorización de emergencia de la vacuna. La FDA decidirá si actualiza su autorización del fármaco para incluir la tercera dosis para la población general (que ya autorizó en agosto para inmunodeprimidos). Ese laboratorio presentó los datos con los que cuenta para apoyar su pedido de autorización para aplicar una dosis de refuerzo.
En general, se notificaron 4.439 nuevos casos confirmados de COVID-19 y 294 casos de enfermedad grave en la cohorte sin refuerzo, en comparación con solo 934 casos nuevos y 29 individuos gravemente enfermos en la cohorte de refuerzo.
“Doce días o más después de la administración de la dosis de refuerzo, la tasa de infecciones confirmadas y de casos de enfermedad grave fue más de 10 veces menor en la cohorte de refuerzo en comparación con la cohorte sin refuerzo”, explicaron los autores del estudio.
El estudio fue una colaboración de investigadores del Ministerio de Salud, el Instituto de Ciencia Weizmann, el Instituto Tecnológico de Technion - Israel, la Universidad Hebrea de Jerusalén, el Instituto Gertner del Centro Médico Sheba y el Instituto de Investigación KI.
El equipo dijo que los estudios futuros deberían determinar la eficacia a largo plazo de la dosis de refuerzo contra la variante Delta y otras posibles variantes futuras de preocupación.