Este martes 6 de diciembre inicia el estado de excepción que ha decretado el gobierno de la República a través de la Secretaría de Seguridad, con el fin de poner en marcha el plan de seguridad contra la extorsión y delitos relacionados.

El estado de excepción tendrá una vigencia de 30 días y durante este tiempo la Policía Nacional y fuerzas vivas relacionadas podrán "detener a las personas que determine responsables de asociarse, ejecutar, o tener vinculaciones, en la comisión de delitos y crímenes”, según el decreto firmado y publicado en el diario oficial La Gaceta.

El decreto solamente aplica para dos municipios del país: Distrito Central y San Pedro Sula. En total son 89 colonias en el Distrito Central y 73 en San Pedro Sula.

El fin principal de esta medida de seguridad es intervenir las colonias donde se gestan muchos de los delitos relacionados a la extorsión y demás para atacar de frente este flagelo de la delincuencia que tanto ha afectado a los hondureños por muchos años.

En San Pedro Sula se incluyen colonias de mucha peligrosidad como La Unión, Rivera Hernández, Suazo Córdova, Miguel Ángel Pavón, San José V, Guillén, entre muchas otras.