El máximo exponente del Vaticano y de la religión católica a nivel mundial, Jorge Vergoglio o Papa Francisco I, ha aceptado darle un beso en la mejilla a una monja para aliviar las críticas que ha recibido por el incidente en el que sujetó a una fiel creyente hace unos días.

El Papa accedió, no sin antes declarar que lo haría si la monja no lo mordía.

Esto sucedió cuando el Papa entraba al auditorio del Vaticano al inicio de su audienci general semanal, cuando la hermana le pidió el beso, Francisco negoció los términos. "Te daré un beso, pero mantente calmada ¡No muerdas!" le dijo el Papa a la monja.

Francisco había recibid bastantes críticas en redes sociales y demás medios, por haber protagonizado un manotazo a una fiel creyente que se había acercado al mismo para saludarle. La creyente le sujetó fuertemente el brazo, a lo que el Papa reaccionó molesto, y soltó un manotazo para soltarse.