El delantero colombiano y flamante fichaje del Olimpia para esta temporada, Yustin Arboleda, no ha desentonado el día de ayer en el partido que enfrentó al Motagua en el primer clásico capitalino del año.

El colombiano demostró todo lo que es como jugador, la potencia, el gol y la actitud, muchas veces negativa, que posee el delantero en momento de apremio.

Ayer Yustin se estrenó de dos maneras con el Olimpia, anotando un golazo y haciéndose expulsar por doble amarilla tras la dura entrada ante un rival motaguense.

Arboleda logró anotar su primer gol con el león como solía hacerlo con el Marathón, con un disparo cruzado que se metió por el ángulo izquierdo bajo del marco de Jonathan Rougier. Además, lo hizo contra el mejor portero de la Liga Nacional.

Lo inusual en estos casos en general, pero no es su caso en específico, fue la expulsión que recibió minutos después en el partido. Yustin se tuvo que ir a duchar rápido tras lastimar a un rival en una entrada que significaba la segunda amarilla contra el delantero estrella del equipo.

El cafetero ha sido expulsado hasta siete veces en el fútbol hondureño, algo que no suele sucederle a un delantero centro que se desenvuelve en el área rival la mayoría del tiempo. El temperamento de Yustin es muy marcado, demostrando mal manejo del carácter en momentos inoportunos.

Yustin fue expulsado cuando su equipo perdía 1-2, más que se le dió la confianza sobre Jorge Benguché y con una amarilla en el bolsillo. La conclusión fue que el colombiano no manejó bien la situación y finalmente se fue expulsado, en el día que se le recordará como el que demostró toda su esencia en 75 minutos.