La Casa Blanca anunció el viernes que prohibirá el ingreso de los viajeros procedentes de ocho países africanos, en un intento por contener la llegada de la nueva variante del COVID-19, bautizada por la OMS como Omicrón.

Los viajes estarán prohibidos en su mayoría a partir del lunes desde Sudáfrica, Botswana, Zimbabwe, Namibia, Lesotho, Eswatini, Mozambique y Malawi, dijo un alto funcionario de la administración del presidente Joe Biden.

Solo los ciudadanos estadounidenses y los residentes permanentes podrán viajar desde los ocho países, agregó el funcionario. “La política se implementó con mucha precaución a la luz de una nueva variante de Covid-19 que circula en el sur de África”, agregó.

“Nuestros científicos y funcionarios de salud pública están trabajando rápidamente y estudiando sobre esta variante”, agregó el funcionario. “El presidente (Joe) Biden prometió tomar todas las medidas necesarias para mantener a los estadounidenses seguros y derrotar la pandemia, y este fue un paso recomendado por los expertos médicos del gobierno de los Estados Unidos y el Equipo de Respuesta Covid-19″.

El viernes, la OMS afirmó que la evidencia disponible permitía suponer que existe un mayor riesgo de reinfección con esta variante B.1.1.529, aunque no emitió nuevas recomendaciones sobre limitación a los viajes u otras medidas sanitarias preventivas. En cambio, sí pidió a la comunidad científica internacional que continúe los trabajos de seguimiento de ésta y nuevas variantes.

Más temprano, durante una entrevista con CNN, el principal epidemiólogo asesor del Ejecutivo, Anthony Fauci había dicho que tomarían una decisión sobre los viajes “tan pronto” como recibieran más información.

Antes que Estados Unidos, la Unión Europea, Israel y Canadá figuraban entre los países que habían tomado la misma decisión, en un intento por contener la diseminación de esa nueva variable.