El equipo merengue viajó a Alemania para llevar a cabo su segundo partido de la fase de grupos ante el Borussia Monchengladbach en lo que terminó por ser un partidazo y que logró sacar el equipo blanco en base a lucha, coraje y hasta suerte.

Desde lo previsto hasta lo propuesto por ambos equipos, el partido se llevó a cabo tal cual se esperaba. El equipo alemán jugaba sin la pelota y buscando pases rápidos para crear oportunidades con sus delanteros y el Real Madrid manejando el balón y proponiendo el partido desde el inicio.

Cada quien con su idea logró marcar diferencias, sobre todo el equipo alemán, que no desentonó nunca en el partido y mantuvo la misma modalidad de partido mientras le duraron las piernas. Sus dos delanteros, Thuram y Plea ganaban en velocidad y aprovechando los errores blancos.

Los alemanes sacaron provecho primero, con el gol de Thuram tras una jugada con muchos errores de parte de la defensa española. Luego pudieron aumentar su ventaja con el segundo de Thuram en la segunda parte, en otro error en el posicionamiento de Ferland Mendy para habilitar a su compatriota.

El equipo blanco tuvo que cambiar su estilo de juego, sacando a Vinicius y Asensio para penetrar en base a centros y juego con sus interiores. El ingreso de Modric y su complemento con Valverde fue muy importante para sacar este empate de oro.

El primer gol del club blanco fue así, un centro al segundo palo al que Casemiro llegó justo sobre la línea de meta y acomodó a Benzema para acercar a los suyos en el resultado. Para el empate fue exactamente lo mismo, un centro de Modric lo cabeceó Sergio Ramos para que Casemiro marcara y pusiera el 2-2 final.

El Real Madrid logró sumar su primer punto en la UEFA Champions League, además de acabar con la racha de tres partidos perdidos consecutivos en el campeonato europeo.

El Borussia por su parte suma su segundo empate y se ubica en el primer lugar junto al Inter, ambos con 2 puntos en total. La siguiente jornada de Champions se disputa el próximo 3 y 4 de noviembre.